La Dieta Paleo, ¿funciona?
Otra dieta de modo atrae la curiosidad de los más atrevidos,
sobretodo de los deportistas. Se trata de la llamada dieta paleolítica o dieta
de las cavernas, basada en lo que comían nuestros antepasados de la edad de la
piedra: mucha proteína animal (carne y pescado) , mucha fruta y verdura, poco cereal
integral y nada de lácteos. Los deportistas que enseguida se notan con más energía,
con un menor peso para su disciplina y por tanto una mejora significativa de su
rendimiento.
La teoría de la dieta paleolítica ¿de qué va esta dieta?
La dieta paleolítica se basa en la idea de que el hombre
moderno no está adaptado genéticamente a los alimentos procesados y a los
nuevos sistemas nutricionales de hoy en día. Su creador, el médico LorenCordain, especialista en genética, defiende el consumo de aquellos alimentos
que comía el hombre de las cavernas, es decir, nuestros antepasados de la edad
ancestral, tales como frutas, huevos, raíces y algunos vegetales, y excluye
todo el alimento procesado o modificado, los lácteos, la sal y los granos.
El
autor del libro La dieta paleolítica afirma que casi todos los problemas de
salud actuales son consecuencia directa de lo que comemos hoy en día, y por este motivo sus
investigaciones se centran en lo que comían los nuestros antecesores de la
época paleolítica. Además, también concluye que los nuestros antepasados no
estarían adaptados a los alimentos nuevos de la sociedad actual; y que no ha
habido ningún cambio significativo en el genoma humano en los últimos 10.000
años para considerar que el hombre actual pueda adaptarse a los nuevos hábitos
alimentarios de la sociedad actual.
Consideraciones de la dieta paleolítica para deportistas
El hecho de que muchos deportistas se noten con más energía
en un inicio se puede deber principalmente a la disminución de azúcares, grasas
saturadas y al incremento de las proteínas, de los vegetales y las
elaboraciones sencillas exentas de grasas o combinados de salsas. Por lo tanto,
en general se mejoran los hábitos nutricionales que tenían antes los
deportistas al mismo tiempo que se goza de un mayor confort digestivo con lo
que sometemos a nuestro aparato digestivo a un menor estrés y le garantizamos
un mejor funcionamiento.
CONCLUSIONES:
- Sí que es cierto que muchos alimentos modernos están
reñidos con nuestra constitución genética y que la evolución de nuestra especie
no se corresponde con la evolución y el cambio que ha sufrido nuestra
alimentación y que, además, no son muchos los inconvenientes para la salud. En pocos años
han aparecido nuevos alimentos y sustancias a los que nuestro código genético
aún no ha tenido tiempo de adaptarse.
- Lo que está claro es que muchos alimentos de la dieta
occidental han estado procesados y manipulados, lo cual implica que un buen
número de nutrientes originales se han perdido durante el proceso de
manipulación. Por otra lado, los alimentos industrializados incorporan
sustancias que podrían actuar desfavorablemente sobre la salud: aditivos,
grasas de baja calidad, plaguicidas y otras sustancias potencialmente tóxicas.
Todos estos cambios nutricionales provocan un estrés de muchas partes de
nuestro organismo, hecho que comporta la aparición de muchos problemas de
salud, tales como alergias, intolerancias alimentarias, etc...
Consejo:
Se recomienda que siempre que se quiera modificar los
hábitos alimenticios, antes de seguir dietas de modo autónomo es conveniente
pedir asesoramiento a un especialista. Los libros muchas veces no personalizan la dieta, y, por lo tanto, no se llegan a
adaptar a las necesidades individuales de la persona. Lo mismo pasa con los
artículos de opinión o blogs.